El desembarco explosivo de la Inteligencia Artificial hizo que todos experimentáramos y analizáramos como podríamos implementarla en nuestro trabajo.
Algunas cosas aparecen como brillantes, otras decepcionantes y otras como promisorias, pero de difícil evaluación en cuanto a su efectividad y alcance.
Este año hemos debutado en el uso de estas herramientas, y hemos probado infinidad de ellas. El dictamen hasta ahora es que esta tecnología debe ser supervisada por la inteligencia natural, pues hay que elegir “qué, cuándo, cómo y dónde”. Los textos es mejor verificarlos pues pueden tener errores de concepto o no ser relevantes, o terminar siendo una charlatanería marketinera que a esta altura a todos nos cae indigesta. En cuanto a las imágenes, pareciera que detrás de la cortina todas usarán el mismo motor, pues todos los resultados dan imágenes naif, poco realistas, terminando todos los productos pareciéndose, lo que hará que muy pronto acuñen el término “estilo AI”. Y en cuanto a video, en la práctica solo logramos la simulación de “doblaje”: hacer hablar a la modelo el “speech” requerido.
También los módulos de asistencia SEO por Inteligencia Artificial prometen mucho pero no producen cambios relevantes en el posicionamiento.
Como el “estilo AI” o naif, no nos convence para todos los casos, mezclamos estas imágenes con otras fotos naturales para obtener un resultado más acorde a lo buscado.
Como dijimos, el 2024 empezamos a utilizar todas estas herramientas en el diseño web, en este caso para el rediseño uno de los sitios web de nuestro cliente en Texas, Estados Unidos: SERVIREP https://appliancerepairservirep.com , en este caso un sitio en inglés.
Aparte de los módulos de SEO (posicionamiento en buscadores) con Inteligencia Artificial, estamos usando la AI para textos, fotos y videos.
En este caso, para el video cambiamos el fondo por una cocina con sus electrodomésticos ya que esta empresa se dedica a la reparación de los mismos.